Se trata de una innovación de la Universidad Nacional de Córdoba. Ya fue patentada en Estados Unidos.
Un equipo de investigadores de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) ha innovado al emplear pelo de vaca para desarrollar baterías de litio-azufre de avanzada generación.
El objetivo de este trabajo fue superar varias limitaciones asociadas a la eficiencia de las baterías. Esto incluye aspectos como la cantidad de ciclos de carga-descarga que la batería puede soportar, la rapidez de carga y la densidad de energía, todo ello sin comprometer su seguridad al prevenir sobrecargas, cortocircuitos y sobrecalentamientos.
Las baterías comunes poseen un ánodo de grafito y un cátodo compuesto de cobalto y níquel, elementos que son escasos, costosos y contaminantes. El empleo de azufre como material para el cátodo podría mejorar estas limitaciones, ya que el azufre es más abundante, menos contaminante y más económico. Sin embargo, el azufre necesita una estructura de soporte para formar el cátodo, y aquí es donde entra en juego el pelo de vaca.
El equipo de investigadores del Laboratorio de Energías Sustentables (Laes) de la UNC ha utilizado el pelo de vaca para producir biocarbón, el cual ofrece estructuras micro y nanoporosas que podrían mejorar la velocidad de carga, la densidad de energía y brindar una mayor estabilidad en los ciclos de carga.
Los resultados obtenidos son notables: mientras que una batería de litio convencional de 200 kilos permite que un automóvil recorra hasta 200 km, las nuevas baterías de litio-azufre podrían ampliar la autonomía hasta los 400 km.
Esta innovación abre perspectivas emocionantes en el desarrollo de baterías más eficientes, utilizando recursos más disponibles, menos contaminantes y contribuyendo potencialmente a una movilidad más sostenible y avanzada.