Toyota Corolla Cross Hybrid: moderno y eficiente

Se trata de un modelo que logró convertirse en marca por sí mismo. Es como una de las mejores opciones precio-producto sin resignar equipamiento ni prestaciones.

Con 11 generaciones a cuestas, Corolla es uno de esos modelos que logró convertirse en una marca en sí mismo. Un best seller global que en Argentina también consiguió ganarse una reputación.

El Corolla, no obstante, enfrenta un desafío que impone el mercado: el de la caída de los sedanes medianos ante la voracidad de los SUV. Una salida al dilema, en una jugada no exenta de riesgos para Toyota, es expandir el prestigio del Corolla al formato estrella, el de los SUV.

Así llegó, made in Brasil, el Corolla Cross, que se posiciona entre los medianos como una de las mejores opciones precio-producto sin resignar equipamiento ni prestaciones. La versión manejada es la hybrid.

A nivel estético, tiene rasgos que se asemejan a la RAV4, su hermana mayor. La altura es elevada y exhibe musculatura en las puertas y en los pasarruedas, que tienen protecciones plásticas en un guiño típico off road, pese a que el Corolla Cross no ofrece opciones 4×4. Lo menos convencional es la parrilla de amplia boca, agresiva, mientras que las ópticas rasgadas con la línea led horizontal es, junto a las llantas de 18 pulgadas, de los detalles exteriores más logrados. La pelea por el cartel se da en el portón trasero: allí, la palabra “Cross” luce en grandes dimensiones, opacando a “Corolla”, que asoma como banda soporte.

LEER TAMBIÉN |  Mercedes-Benz C300: lujo, tecnología y potencia

Si en el exterior el parentesco con el Corolla es difuso, en el interior, al primer vistazo, la semejanza es casi total. La plancha plana y minimalista, el tablero, el volante y la pantalla son un enlace directo al sedán. La calidad y los materiales son correctos, con un mix entre plásticos duros y materiales blandos. Las butacas en cuero tienen ajustes eléctricos y resultan agradables. Las plazas traseras, con espacio de sobra, aun con una reducción de la distancia entre ejes, contra el Corolla tradicional.

En cuanto a su respuesta, a diferencia de otros hibridos este da la sensación de brindar una potencia extra cuando uno más le necesita gracias a su motor 1.8 naftero Atkinson (98 CV) sumado al 1 NM eléctrico de 72, que rinden 122 en conjunto. Su caja, una eCVT, es eficiente y cumplidora.

El equipamiento de esta variante en seguridad es excelente: sensores de estacionamiento delanteros y traseros, siete airbags, control de estabilidad y de tracción, con el paquete Toyota Safety Sense como plus (sistema de precolisión frontal, asistente de mantenimiento de carril, luces altas automáticas y control de velocidad crucero adaptativo).

LEER TAMBIÉN |  Chevrolet Tracker: tecnología y gran rendimiento